Historias: Éric Cantona

En el barrio de Les Caillols, en Marsella, producto de un padre pintor y una madre costurera, nacería uno de los jugadores más grandes de los 90's. Éric Cantona empezaría a jugar al fútbol a los 6 años y su carrera lo llevaría a ganar títulos con todos sus equipos, inclusive 4 Premier League, 2 FA Cup, y 2 copas con la selección de Francia, pero por supuesto uno de sus palmarés más grandes, ser el logo de Todo Pelota. 

Cantona empezaría su carrera profesional jugando para el AJ Auxerre, por supuesto con polémica como en toda su carrera, ya que se habría comprometido a jugar para el Niza, pero decidió cambiar de equipo para estar cerca de su familia. Este equipo le quedo chico rápidamente al futuro multicampeón y cuatro equipos lo llamaron cuando pidió el traspaso: AS Mónaco, PSG, el Racing de París y el Olympique de Marsella. Cantona, predeciblemente, elegiría el club de su casa. Lamentablemente Marsella no tenía el mismo amor por el y lo dejó ir tras 3 años. Finalmente, Cantona llegaría a su nueva casa, al país donde mejor le iría: Inglaterra.

El Leeds United, equipo de ganada popularidad en Argentina, solo contaría con el por 6 meses, pero fue suficiente para convertirse en un ídolo de Elland Road, ya que ganaría su primera Premier League jugando solo 13 partidos, donde hizo 11 goles. Incluso con esto, el presidente del Leeds consideraba que un jugador con la personalidad de Cantona era malo para su equipo así que se lo ofreció a un técnico que era conocido por aceptar Bad Boys: Sir Alex Ferguson. 

El desembarco en Manchester United fue muy exitoso para todos los sujetos incluidos, no solo para Cantona que rompería todo tipo de récords, ganaría todo tipo de campeonatos y hasta quedaría tercero en la votación del Balón de Oro de 1993 por detrás de Baggio y Bergkamp; sino también para el, en ese momento, irregular en ataque Manchester, que se convertiría en el gigante que conocemos hoy. A pesar de haber ganado todo lo que ya mencionamos, hay una competencia que nunca ganó, La copa del mundo.

La selección de Francia, tal vez el único equipo donde no pudo sobresalir. Cantona no solo nunca ganó un mundial, ni siquiera jugó uno. Tras no ser usado en un amistoso en 1989, el delantero francés llamó a los dirigentes "unos idiotas" por lo que fue suspendido durante un año, Francia sin Cantona no clasificaría el mundial de 1990. Tampoco clasificaría en 1994 y, finalmente, en 1995 durante un partido del Manchester United, tras ser atacado verbalmente por un hincha rival, Cantona lo atacaría con una icónica patada al pecho. El seleccionado Frances decidiría que por esto no volvería a contar con él. en 1997 Cantona afirma que se retiraría si no lo convocan al mundial de Francia 1998. Seguros en su decisión Francia no lo llama por ende él se retira del futbol profesional. Francia saldría campeón del mundo en esa competencia.

A pesar de ser una figura polémica en la cancha, Cantona nunca olvidó de donde vino y siempre peleó por la justica social, siempre fue una voz para aquellos que menos tenían, y siempre luchó por los derechos de igualdad, al punto que cuando le preguntaron sobre el mejor momento de su carrera, afirmó que era la icónica patada al hincha diciendo "Patear a un fascista, no se saborea todos los días". Sin duda Éric Cantona es una figura con una historia digna de Hollywood. 

Por Francisco Medina.