Renacidos
Es muy normal que al finalizar una temporada o un año calendario, se
entreguen diversos premios a los deportistas destacados en cada disciplina. La
revista Frances Football, por ejemplo, entrega el famoso Balón de Oro, que
distingue al "mejor futbolista masculino" del último año. La NBA por
su parte, al finalizar cada temporada entrega una serie de premios, algunos de
ellos son:
- Most value player (MVP): "Jugador más valioso", algo así como el equivalente al Balón de Oro.
- Defensive Player of the Year (DPOY): "Jugador defensivo del año".
- Rookie of the year (ROTY): "Novato del año", que destaca al mejor jugador nuevo en la liga.
- Sixth Man of the Year: "Sexto hombre del año", que galardona al mejor jugador suplente.
- Most Improved Player (MIP): "Jugador con mayor progreso", que premia al jugador que muestra el mayor progreso respecto a la temporada pasada.
En el caso del tenis, la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP)
también entrega una serie de premios bastante similares a los de la NBA, tanto
para singles como para las parejas de dobles. Sin embargo, hay uno de estos
galardones que nos llamó la atención.
Nos referimos al "Comeback Player of the Year", algo así
como "mejor regreso del año", premio que destaca al jugador que a
pesar de haber sido figura del circuito en algún momento, sufre una caída, para
luego levantarse. Para renacer. Es decir, podemos decir que este es el premio
que la ATP le entrega a los "Renacidos" del tenis.
Se trata de un premio bastante importante y que es votado por los
mismos jugadores. Para tener en cuenta, aquí dejamos una pequeña lista de
algunos de sus ganadores (junto al año en que fue otorgado el premio): Nadal
(2013), Federer (2017), Djokovic (2018) y Murray (2019). Y dentro de sus
ganadores, encontramos tres jugadores que lo han conquistado dos veces. Se trata
de Sergi Bruguera, Tommy Haas y Juan Martín Del Potro. Sobre este último vamos
a hablar un poco.
Juan Martín es conocido como "La torre de Tandil", aunque
posiblemente deberíamos modificar este apodo por "El fénix de
Tandil", pues se trata de un tipo capaz de volver de sus cenizas en
repetidas ocasiones. Durante los años 2008 y 2009 Juan se encargó de hacerse un
renombre dentro del circuito, ganando varios torneos, llegando a las finales de
otros, colocándose en el quinto puesto del ranking y haciendo algo que solo
Rafa y Nole han podido hacer: ganarle una final de Grand Slam a Roger Federer.
Ese triunfo en Flushing Meadows catapultó a Delpo a la elite absoluta
del tenis. Es tan así que a principios de 2010 logró ser nº4 del ranking. Sin
embargo, comenzaron las lesiones. Su primer inconveniente surgió en su muñeca
derecha, que lo apartó del circuito durante todo este año (siendo operado en mayo),
terminando la temporada con muy pocos partidos y en el puesto 258, aunque tocó
el fondo del ranking en enero del 2011, cayendo al puesto 485.
Sin embargo, en 2011 lo veríamos renacer. Pues una serie de resultados
extraordinarios lo levarían a finalizar el año al borde del top 10, finalizando
en la 11º posición. Todo esto fue premiado por sus compañeros de circuito,
quienes le entregaron el premio al "Renacido" del 2011.
Los siguientes dos años también fueron llenos de conquistas y
victorias, llegando a ocupar el quinto puesto del ranking al finalizar el año
2013. Y cuando parecía que la Torre estaba a punto de dar un salto más en su
calidad, su muñeca izquierda se lo negó. Esta lesión lo apartó casi por
completo por dos años, llegando a pensarse que el fin de su carrera era una
posibilidad. Pero Juan Martín ya había demostrado que tenía algunas plumas del
ave fénix. Y en 2016 volvió a renacer.
Es que luego de tres operaciones en su muñeca izquierda, Juan cayó al
puesto 590 al final del 2015. Pero como dicen por ahí "año nuevo, vida
nueva". Y acá debemos decir que Delpo mostró un nivel asombroso durante
todo el 2016, lo cual le permitió finalizar nº38 del mundo. Sin embargo, hay
resultados más que destacados durante este año, como sus victorias a Djokovic y
Nadal en los Juegos Olímpicos (finalizó con medalla de Plata), así como sus
victorias sobre Murray y Cilic (nº6 del mundo en ese momento) en Copa Davis,
que ayudaron a que Argentina conquiste por primera y única vez la ensaladera de
plata. Todo esto hizo que en 2016 Juan Martín vuelva a ser coronado como
"el renacido de la ATP".
Los años siguientes fueron de gloria para Delpo, conquistando su
primer Máster 1000, llegando al podio del ranking (nº3) y consiguiendo otra
final en el US Open, donde caería contra Nole en un partido de tres sets. Sin
embargo, la vida le plantó un nuevo revés en octubre de 2018, cuando una caída
en un partido termino en una fractura en su rótula, lesión contra la cuál sigue
luchando. Sabemos que Juan dará batalla, porque sabe muy bien lo que es
renacer.
Y aunque la NBA no corone a los jugadores que gozan de "una
segunda vida", está claro que hay varios que han logrado volver a brillar
luego de las lesiones. Es el caso de Shaun Livingston, que con 19 años ya se
encontraba en las filas de Los Ángeles Clippers, peleándola en la NBA. Sin
embargo, el 26 de febrero de 2007 sufriría una lesión tremenda en su rodilla
izquierda, rompiéndosela casi por completo: se dislocó la rótula, se fracturó
partes de dicha pierna, se desgarró el menisco lateral y sus ligamentos
cruzados anteriores y posteriores, y se esguinzó el ligamento lateral.
Y si leer la lista de lesiones a uno ya le revuelve el estómago, ver
el vídeo de la lesión es todavía más escalofriante. Tan fuerte fue la caída que
muchos se preguntaban si podría volver a caminar, ya descartando absolutamente
un regreso al deporte profesional. El médico de los Clippers de esa época dijo
que se trataba de la lesión más grave que había visto y que podría haber en una
rodilla. Tanto es así que se planteó la posibilidad de amputar su pierna
izquierda.
Sin embargo, el 16 de junio de 2008 Livingston se encontró con el
increíble alta médico y autorización para jugar al básquet una vez más. De esta
manera entre 2008 y 2014 vistió la camiseta de varios equipos: Miami, Oklahoma,
Washington, Charlotte, Milwaukee, Cleveland y Brooklyn. Finalmente, el 11 de
Julio de 2014 Shaun llegaría a las filas de Golden State Warriors. Y lejos de
ser "uno más" dentro de la plantilla, se convirtió en una de las
piezas claves de los Warriors, formado parte de su potente segunda escuadra.
Es que luego de su lesión, Livingston decidió renacer, y para ello,
perfeccionó una técnica de tiro que le permitía que su altura (2,01 metros)
como base le diera ventajas sucesivas a la hora de atacar. Esta habilidad
desarrollada al máximo ayudó a que Golden State conquistara 3 anillos en el
lapso de 5 años (estando a tan solo tres victorias de ganar los 5 anillos).
También dentro del fútbol tenemos renacidos, como el grandísimo Martín
Palermo, autor de uno de los goles más gritados por la selección argentina. El
"Titán del gol" se formó en las categorías inferiores de Estudiantes
de La Plata. Luego de 5 temporadas en la primera de dicho club, migró hacia
Boca, a pedido del mismísimo Diego Armando Maradona. Su comienzo fue un poco
duro, pues tardó 452 minutos en marcar su primer gol, además de ser rechazado
por la hinchada debido a su característica "torpeza".
Sin embargo, la llegada de Bianchi no solo le cambió la vida al mundo
Boca, sino también a Palermo, pues en el año 1998 el club de la ribera
conquistó el torneo Apertura como invicto (primer título en 6 años) y el
delantero marcó 20 goles en 19 partidos. Su racha goleadora y las conquistas de
Boca se extendieron durante el año 99, aunque el 13 de noviembre el Titán
sufriría una rotura de los ligamentos cruzados de la rodilla derecha. A pesar
de esto, permaneció en cancha y marcó su gol número 100 en primera división.
Luego del partido se confirmó el diagnóstico y debió ser operado, además de
someterse a seis meses de recuperación.
Pasado este tiempo, en mayo del 2000, Palermo volvió a las canchas.
Volvió a nacer. Y fue justo a tiempo, pues Boca jugaba cuartos de final de Copa
Libertadores contra River. El delantero ingresa en un momento complejo del
partido, pues Boca ganaba 1-0 y se debía definir la serie por penales. Pero 13
minutos después, el xeneize logró marcar dos goles, siendo uno de ellos de
Palermo. Y como si esto fuera poco, Boca conquistó la Libertadores, y
posteriormente, venció al Real Madrid de "los galácticos" en la Copa
Intercontinental, siendo Palermo una de las piezas fundamentales del equipo.
Cabe destacar que en dicha final contra el equipo merengue, el Loco fue al
autor de los 2 goles que le permitieron a Boca gritar campeón.
Luego de dicha conquista migra hacia España, pasando a ser parte de
las filas del Villareal. Y cuando todo parecía ir bien, a Palermo se le cayó el
mundo abajo, literalmente. Pues luego de romper una sequía de goles, fue a
celebrar junto a la hinchada, lo que terminó con un muro sobre su pierna,
fracturándose tibia y peroné. Esta lesión provocó un bajón en su nivel
futbolístico, así como una serie de pasajes por varios clubes españoles, sin
ninguna trascendencia.
Pero Martín tenía mucho más para dar, y a mediados de 2004 regresaría
a Boca. Y a partir de ahí firmaría una carrera extraordinaria, ganando cuanto título
uno se pudiera imaginar, y convirtiéndose en el goleador histórico del xeneize,
con 236 tantos, así como uno de los jugadores más importantes de su historia.
Claro que no todos los renacidos volvieron de lesiones, porque no
todas las dolencias son físicas. Esta historia demuestra que los superhéroes
también sufren. Dwight "Superman" Howard fue el pick número 1 del
draft de la NBA en 2004, fue 9 veces All Star, 5 veces estuvo en el mejor
quinteto de la liga, 3 veces fue elegido mejor jugador defensivo del año, ganó
el concurso de volcadas de 2008, lideró la NBA en rebotes por 5 temporadas
consecutivas y en tapones durante 2, y sigue siendo, hasta el día de hoy, el
máximo anotador en la historia de los Orlando Magic.
Claro que, a veces, el éxito despierta al ego. Howard quiso más y fue
a buscarlo a Los Ángeles Lakers, donde no supo ajustarse a no ser la estrella
del equipo. Por su insistencia en querer ser siempre el número 1, Howard
terminó pasando a los Houston Rockets, luego Atlanta Hawks, Charlotte Hornets,
Washington Wizards y, finalmente, otra vez a los Lakers.
Y es que el villano que hay que vencer no es siempre alguien más, el
villano puede ser uno mismo. Eso lo aprendió Howard en la temporada 2019-2020,
nada más y nada menos que en su regreso a Los Ángeles a pedido de Kobe Bryant.
Los Lakers de LeBron James y Anthony Davies no necesitaban otra estrella,
necesitaban un hombre de experiencia que los ayude a llegar a lo más lejos. Y
eso hizo Superman, entendió a la perfección su nuevo rol, acepto los pocos
minutos, acepto ser un mentor y acepto concentrarse en la defensa.
El resto es historia, los Lakers ganaron su campeonato número 17,
Howard ganó su primero y se fue de los Lakers como un campeón. Hoy milita para
los Philadelphia 76ers, que cuentan con uno de los mejores récords de la liga,
con gran participación del renacido superhéroe.
Por Todo Pelota (segmento correspondiente al programa del 11/01/2021).
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